RAFAEL
GÓMEZ JÁUREGUI
(12
de mayo de 1977)
Rafael fue un luchador infatigable, combatió al
fascismo en la Guerra Civil Española, continuó en la clandestinidad hasta que
fue capturado y condenado a pena de muerte aunque se la conmutaron poco
después. Salió de la cárcel y fue uno de los organizadores de la primera huelga
política de la dictadura en 1947. Se tuvo que exiliar y volvió a España en 1968
pero, ironías de la vida, poco más pudo hacer aparte de ver la muerte del
dictador.
El 12 de mayo de 1977, en la semana pro-amnistía
que se celebró en el Euskal Herría terminó sus días. En Rentería, como en
tantas otras localidades, había manifestaciones pidiendo lo que era justo,
sacar a los presos políticos de las cárceles, y Rafael, ya con 78 años en sus
espaldas y habiendo pasado torturas, pena de
muerte y exilio, decidió quedarse en su casa para, eso sí, ver la
manifestación desde su balcón.
La mala fortuna quiso que lo que no hizo el
dictador lo hiciera una ráfaga de subfusil, mientras se encontraba en su balcón
ya por la tarde contemplando el dantesco espectáculo algunas balas atravesaran
su cuerpo y acabaran con un luchador por la libertad.
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